ACNE
(Barros y Espinilas)
ACNE ¿QUE ES?
El acné es una enfermedad auto-limitada de la piel, que afecta principalmente a los adolescentes, pero que puede desarrollarse en cualquier momento de la vida. Generalmente se presenta con lesiones de diferentes formas, como puntos negros, puntos blancos, granos, “barros” y lesiones circulares ubicadas en la capa más profunda de la piel, y cuando se presenta con sólo un tipo de lesión es importante pensar en otros diagnósticos. Aunque se trata de un trastorno auto-limitado, las cicatrices podrían persistir por toda la vida, con un gran impacto psicosocial, por eso la importancia de recibir tratamiento especializado temprano por parte del dermatólogo.
ACNE ¿QUE LO CAUSA?
La presencia de más grasa hace que una bacteria que normalmente vive en la piel (Propionibacterium acnes), prolifere en exceso llevando a inflamación, además, hace que nuestras células de defensa comiencen a atacarlas empeorando el proceso inflamatorio en la piel.
Tipos de acné
Acné neonatal: se puede detectar en recién nacidos desde las 2 semanas de vida, y desaparece espontáneamente en 2 a 3 meses. Se detecta por la presencia de puntos blancos que afectan la nariz y las mejillas. Se cree que es secundario al aumento de la producción de grasa del recién nacido, la cual ocurre de forma transitoria.
¿Qué cosas pueden desencadenar el acné?
Existen ciertos factores que están implicados en el desarrollo del acné, otros que lo pueden empeorar o perpetuar:
Hormonas: Los andrógenos (testosterona y derivados) son unas hormonas sintetizadas por los ovarios, los testículos, la suprarrenal y en menor medida por la glándula productora de grasa de la piel. Su papel en el desarrollo del acné está bien caracterizado y confirmado, generalmente las personas que sufren de acné tienen niveles de andrógenos en sangre más elevados que las personas que no lo padecen, aunque suelen persistir dentro de los límites normales.
Otras hormonas que se asocian con el acné son: la hormona de crecimiento, la insulina, el factor de crecimiento similar a la insulina; la primera hace que aumente los niveles sanguíneos de las otras dos, principalmente del factor de crecimiento similar a la insulina, y esta última hace que se aumente la proliferación de células que revisten la parte interna del folículo, las glándulas productoras de grasa y en estas glándulas induce un aumento de su producción.
Las lesiones características del acné son:
No inflamatorias:
Comedón: Los cuales pueden ser cerrados o puntos blancos, estos son difíciles de visualizar, son lesiones del mismo color de la piel, ligeramente levantadas en los cuales no se observa orificio. Y los comedones abiertos, o puntos negros, son lesiones planas o ligeramente levantadas, en los que se observa un orificio obstruido con un material oscuro.
Inflamatorias:
Pápulas: Lesiones circulares, pequeñas, del color de la piel, rodeadas de piel entre rosada y rojiza.
Pústulas: Lesiones circulares, pequeñas, que tienen contenido de pus.
Nódulos: Lesiones que se ven superficiales, de color entre rosado y rojizo, pero que al palparlas se siente su compromiso más profundo en la piel.
Cicatrices: son una complicación de la enfermedad:
Puntiformes: Hoyuelos.
Onduladas: Aspecto de ondas.
Deprimidas: Depresiones de la piel más anchas que las puntiformes.
Hipertróficas: Levantadas, de color rosado-rojizo al principio para posteriormente tomar el mismo color de la piel.
El sitio de localización principal del acné es la cara, y en menor grado el pecho y la espalda, esto sucede porque en estas zonas del cuerpo suele existir más glándulas productoras de grasa asociadas al folículo piloso.
La piel de las personas que estas predispuestas a tener acné, o que ya tienen la enfermedad, generalmente es oleosa, tiene una apariencia brillante, además que tienen una mayor susceptibilidad a generar unas lesiones rojizas, con escama sobre su superficie, que a veces producen piquiña, típicamente en el cuero cabelludo, entre las cejas, en las orejas y alrededor de la nariz, que comúnmente las personas denominan como “caspa”.
El sitio de localización principal del acné es la cara, y en menor grado el pecho y la
Lo que debe hacer:
–Limpieza diaria con geles limpiadores libres de jabón (syndet), se puede realizar de 1 a 2 veces al día.
-Usar cosméticos en polvo o sueltos.
–Retirar el maquillaje, las capas de protector solar que uso durante el día en la noche.
-Aplique protector solar en un vehículo con concentración baja de grasa (por ejemplo gel)
–Lavar el cabello diariamente, especialmente si éste es oleoso (Graso)
Lo que debe evitar:
–Usar cremas hidratantes, por su efecto de oclusión sobre el orificio del folículo piloso, empeorando la enfermedad.
-Aplicar cosméticos a base de grasas, como bases, correctores, polvos compactos.
-Lavar y frotar de forma repetitiva la piel, pues altera su función natural de barrera.
–Usar el cabello en la cara.
–Pellizcar, apretar, rascar las lesiones, pues esto puede precipitar a la formación de cicatrices.
espalda, esto sucede porque en estas zonas del cuerpo suele existir más glándulas productoras de grasa asociadas al folículo piloso.
Tratamientos para el acné
El tratamiento del acné debe ir orientado a tratar la causa:
- Disminuir la proliferación de las células que revisten la parte interna del folículo piloso.
- Disminuir la actividad de las glándulas productoras de grasa.
- Reducir la proliferación de bacterias ( acnes) en el folículo piloso.
- Ejercer un efecto contra la inflamación.
Dependiendo la severidad del acné el dermatólogo elegirá el tratamiento más adecuado, el cual podría ser para aplicar o para ingerir.
TRATAMIENTO LOCAL (PARA APLICAR)
Higiene: Limpiadores sin jabón que contengan medicamentos como ácido salicílico o peróxido de benzoílo, que ayudan a mantener el pH de la piel para no afectar su función de barrera, además de actuar eficazmente contra el acné.
Ácido Salicílico: Produce una exfoliación de las células de la capa más superficial de la piel, disminuyendo la formación del tapón de células dentro del folículo piloso. Puede producir reacciones irritantes leves.
Ácido Azelaico: Tiene propiedades antimicrobianas (actúa matando o inhibiendo el crecimiento de microbios), disminuyendo la población de P.acnes. Puede producir un ardor, el cual es transitorio.
Peróxido de Benzoílo: Es un poderoso anti microbiano, disminuye la población de bacterias y además rompe las moléculas de grasa. Puede ser irritante, se usa con gran frecuencia no sólo por sus efectos ya descritos, sino también porque las bacterias no tienen la capacidad de generar resistencia a este medicamento.
Antibióticos: Los más usados de forma tópica, son la clindamicina y la eritromicina, tienen un efecto antimicrobiano. Se formulan con mayor frecuencia en preparaciones en combinación con peróxido de benzoílo, lo que le confiere disminución de la resistencia de las bacterias a estos antibióticos.
Retinoides: Actúan disminuyendo la proliferación de las células dentro del fólico piloso, además que tienen un efecto en contra de la inflamación. Pueden ejercer una reacción irritante inicial, la cual es transitoria. Se recomienda el uso de protector solar durante el tratamiento con retinoides pues al disminuir la proliferación de las células de la piel, hacen que la capa más externa de ésta, se encuentre un poco más delgada, haciéndola más sensible a la luz ultravioleta. Constituyen unos de los pilares del tratamiento del acné.
TRATAMIENTO SISTÉMICO
Antibióticos: Entre los más usados están los del grupo de las tetraciclinas su principal mecanismo es la reducción de ácidos grasos libres, su efecto en contra la inflamación, además que disminuye la población de P. acnes. La eritromicina, es otro antibiótico descrito para el uso en pacientes con acné, pero debido a la gran resistencia de las bacterias a este antibiótico, se reserva solo para mujeres en embarazo, las cuales no pueden ingerir tetraciclinas. El trimetoprim-sulfametoxazol, se usa en caso de acné severo que no mejora con la administración de otros antibióticos, ya que en algunas personas suele desencadenar más síntomas digestivos. Los antibióticos se usan durante 6 a 12 semanas.
Terapia Hormonal: Ésta va enfocada a disminuir la acción de los andrógenos (testosterona y derivados) sobre las células del folículo piloso y sobre la glándula productora de grasa, normalmente estas hormonas aumentan la proliferación de las células del folículo piloso y hacen que las glándulas productoras de grasa aumenten de tamaño y su secreción. Entre los medicamentos más ampliamente usados para este efecto, están los anticonceptivos orales, algunos con capacidad de bloquear la acción de los andrógenos, haciendo que la piel se torne menos oleosa y también con disminución de la formación de lesiones de acné. Entre otros medicamentos que contrarrestan la acción de los andrógenos, de tipo hormonal, la ciproterona, la cual, combinada en estrógenos, tiene una acción anticonceptiva baja; y no hormonal, la espironolactona.
Corticosteroides: Medicamentos contra la inflamación de efecto potente, se reservan para personas con un compromiso severo por la enfermedad, quienes son candidatos de tomar isotretinoína, para disminuir posibles exacerbaciones al inicio del tratamiento.
Isotretinoína: En un medicamento que ha revolucionado el tratamiento del acné severo y resistente al tratamiento. Actúa disminuyendo sustancialmente la producción de grasas por parte de las glándulas productoras de grasa del folículo piloso, lo cual indirectamente hace que disminuya la población bacteriana (P. acnes) y también tiene un efecto en la disminución de la proliferación de las células del folículo piloso. Sus efectos secundarios más frecuentes, son la sequedad de los labios, ojos, boca, nariz y piel, para lo cual generalmente son formulados hidratantes y lubricantes.