La terapia fotodinámica es una modalidad de tratamiento basada en la oxidación a través de la luz de materiales biológicos, inducida por una sustancia que lo hace sensible a la luz (fotosensibilizante) el cual se localiza selectivamente en determinadas células, de forma que al ser iluminadas, estas células resultan destruidas.
La terapia fotodinámica requiere la presencia de tres elementos: una sustancia que le confiera sensibilidad al tejido a la luz, la luz y el oxígeno.
El procedimiento consiste en la aplicación de una crema sobre las lesiones a tratar, esta crema contiene una sustancia que le confiere sensibilidad a las lesiones de acné a la luz. Una hora después de la aplicación de esta crema, se procede a realizar la exposición a la luz. Durante el procedimiento la persona puede sentir ligera sensación de calor o quemazón, luego podría experimentar enrojecimiento de la piel y en algunas ocasiones, descamación, costra o cambios en el color de la piel, el cual es transitorio y suele desaparecer en los siguientes días. Se puede realizar una sesión cada mes, para un total de 4 – 6 sesiones. En las 48 horas después del procedimiento se debe evitar el contacto con la luz solar.
Se puede realizar una sesión cada mes, para un total de 4 – 6 sesiones. En las 48 horas después del procedimiento se debe evitar el contacto con la luz solar.
Las fuentes de luz más utilizadas son los láseres y las lámparas de luz (de arcos de xenón, con filamentos incandescentes y diodos). La terapia fotodinámica se basa en la oxidación a través de la luz del material biológico presente en cierto tejido, y su eficacia se basa en la muerte de la célula directa, el daño de los vasos sanguíneos, la inflamación y la respuesta de defensa de la persona.
El mecanismo exacto de la terapia fotodinámica se desconoce pero se cree que tiene cuatro formas de actuar: matando a la bacteria, dañando la glándula productora de grasa, disminución de la obstrucción del folículo (poro) e induciendo una respuesta de defensa de la persona contra las lesiones de acné.
Entre las contraindicaciones están las enfermedades que empeoran con la luz, o personas muy sensibles a la luz, como lo son las porfirias. La terapia fotodinámica constituye una herramienta relativamente nueva para el acné, y una opción de tratamiento para aquellas personas que desean resultados más precoces.
